martes, 4 de marzo de 2014

Comentario Cuarto Capítulo

Comentario cuarto capítulo

Inicio el último capítulo del libro del Profesor Nubiola sobre las “Prácticas comunicativas y de investigación” con una duda razonable: ¿Cómo, aquí y ahora, se puede necesitar el afecto y la comprensión de quiénes no han nacido y un día pueden llegar a leer nuestros escritos?
Entiendo que la comunicación de la verdad hace que todo se transforme en una realidad inmediata. Es evidente que cuando nosotros comunicamos algo se hace tangible en el papel, deja de pertenecer al mundo de las ideas y baja al ruedo de la sociedad, donde esta sabe, tanto nuestra biografía como de la búsqueda que estamos haciendo de nuestro futuro. Caldera, citado por el profesor, va más allá y asegura que “comunicando en la verdad, cada cual –a la vez-, sale de sí mismo, se entrega a los demás y, en este acto de darse, se encuentra a sí mismo”.
Para encontrarnos a nosotros mismos se deben de dar una serie de condiciones que nos ayudarán a conseguir nuestro objetivo y, entre ellas, hay dos físicas: tiempo y silencio. Es lógica esta afirmación, el silencio nos ayudará a concentrarnos en nosotros mismos, a “oírnos” sin interferencias comunicativas y no podemos analizarnos sin las pausas necesarias, sin las reflexiones contínuas y críticas, en las que el reloj no debe apremiarnos, aunque no podemos escudarnos en él para prolongar nuestro trabajo, en vez de optar por la intensidad del mismo que, no cabe la menor duda, de que acortaría el tiempo. Es una opción el elegir entre los dos.
 El profesor Nubiola nos alerta sobre el peligro de la soledad que “no hace más libre el pensamiento” y nos aconseja “aprender a escuchar… prestando atención a lo que la otra persona nos dice, sin distraernos en la respuesta”. Considero que en el inicio del proceso de búsqueda de la verdad “la soledad no es mala consejera”. Aunque también se puede escuchar lo que nos rodea, pero ahí me pregunto si la respuesta a lo que escuchamos no se produce, la mayor parte de las veces de forma automática. Me explico: yo estoy escuchando a una persona y de forma automática se va construyendo un escenario con lo que está diciendo; los personajes y los objetos que describe se van colocando en el mismo y una vez finalizado su discurso, sin que yo prepare una respuesta, el desenlace ocurre de manera automática  y puede que se materialice a través de mi palabra, pero yo no he buscado una respuesta mientras escuchaba, sino que quién hablaba la ha dado y yo la he materializado.
El profesor Nubiola nos habla de tres coordenadas que nos servirán para educar el carácter, “el corazón”, “la asertividad” y el “amor a la libertad”. Estas tres líneas de actuación nos llevarán a aceptar a los demás tal y como son, a auto disciplinarnos y someter a unas reglas y principios y a aceptar el pluralismo. Considero que para educar mi carácter necesito empezar por mí mismo y aceptar como soy o, tal vez, aceptarme tal y como soy y pensar si quiero seguir siendo así o si debería cambiar; una forma de disciplina que me llevará a someterme a unas reglas determinadas, porque reglas hay muchas y las debo de conocer, pero en libertad optaré por aceptar aquellas que sean más útiles para, necesariamente, educar mi carácter.
En estos momentos no entra, en mis planes profesionales, realizar la tesis doctoral. Leo con atención las consideraciones del profesor Nubiola, a nivel informativo y eso hace que mis reflexiones no nazcan de una implicación personal, sino intelectual. La relación del director de tesis con el doctorando no puede ser de igual a igual, de acuerdo. La verdad y la transparencia son condiciones imprescindibles en la relación profesional: no puede ser de ninguna otra manera. Las relaciones personales entre directores y doctorandos  son: personales y pro lo tanto privadas. El manager o mentor: puede ser un elemento distorsionador en la relación entre el director y el doctorando si se inclina hacia uno de ellos: no es necesario establecer un “tío intelectual”.
Un último apunte a la “Comunidad de investigación y trabajo en equipo”. Cuando leí este epígrafe  me imaginé un estudio científico desarrollado en el CIMA, pero el profesor nos dice que “los pensamientos brotan y se desarrollan en la comunicación con quienes están a nuestro alrededor” y me identifico con su afirmación “el trabajo cooperativo, el trabajo en equipo, es infrecuente en filosofía, quizás porque quienes a ella se dedican buscan a menudo más la originalidad que el común acuerdo y la avenencia”.
“Sólo sé que no sé nada” y por eso me acerco a quienes saben aunque defiendan teorías verdaderas o falsas y eso es una forma  de reconocimiento de la autoridad, porque como apunta el profesor “cuando un texto nos parezca una estupidez hay que pensar que probablemente los ignorantes seamos nosotros”.
¿Qué puede hacer un hombre de letras cuando la ciencia y la técnica es lo imprescindible y al pensamiento y la cultura le aplican un 21% de IVA? Mantener una posición numantina y no renunciar a la búsqueda de la verdad y “no pasar por alto el papel del corazón”.

Este libro ha hecho latir mi corazón con otros corazones, sentir necesidades nuevas y he llegado a la conclusión de que me queda mucha biografía por elaborar para luego plantearme comunicarla. Hoy, mi biografía y mis planteamientos de futuro, no están listos para ser compartidos en círculos que no sean privados: soy un aprendiz en este taller, aunque trabajaré intensamente, porque aspiro a ser un maestro.

Comentario Tercer Capítulo

Interesante afirmación del profesor Nubiola a la hora de iniciar el capítulo "La escritura profesional en Filosofía" en la que nos hace una propuesta "escribir es la manera de poner en limpio lo que pensamos... el esfuerzo de poner por escrito las ideas es lo que hace que estas se desarrollen y se transformen en un trabajo, un artículo o una tesis". Ya no es suficiente escribir, ahora hay que tratar de ser un profesional de la escritura y para ello se hace necesario organizar nuestro trabajo, conocer los otros géneros principales en que desembocará nuestra producción filosófica, las características de los distintos tipos de texto en la que la podemos plasmar, las pautas necesarias para abordarlos y sugerencias para que no se queden en un ordenador guardados, porque hoy en día no es válido el viejo dicho "el buen paño, en el arca se vende".

Volvemos al consejo que, a lo largo del libro, se ha repetido y que considero fundamental no olvidarlo "para escribir filosofía, hay que leer filosofía. Ya no se trata de superar la primera fase de nuestro aprendizaje en la actividad de escritor "para escribir hay que ser antes un buen lector". Ahora estamos ante un nuevo proyecto personal y profesional que requiere inteligencia, constancia, rigor y deseo de reconocimiento público.

Entiendo el planteamiento, pero cuesta introducirse en el nuevo papel propuesto: escritor profesional de filosofía. Si una tarea se plantea de un modo objetivo, como una posibilidad no sólo intelectual, sino también profesional hay que volver a coger lápiz y papel y establecer una ruta con un objetivo y tener muy claro que beneficio queremos obtener tras el gran esfuerzo que debemos realizar. El profesor Nubiola nos da algunos consejos para emprender este camino: hacer un índice y "producir desde el principio un texto definitivo". ¡Imposible! Yo sólo soy un aprendiz de escritor, mni tan siquiera me planteo ser un escritor de filosofía. no soy un escritor fraguado en el espacio y en el tiempo, no podría adoptar una actitud tan engreída, tan sobrada de vanidad y de atrevimiento. Tal vez pueda esbozar una tesis, pero en ningún caso, un texto "definitivo".
Otros consejos que comparto por considerarlos útiles para el desarrollo de cualquier tarea y, probablemente, mucho más en este oficio de escritor de filosofía: fijar el horario del taller y el espacio en el que vamos a desarrollarlo; el material, cuantificable en folios que debemos producir.... ¡Imposible de nuevo asumir el consejo! Y admitir que la producción intelectual es semejante a la de piezas: cuantificable.  Los recien asomados al oficio de escritor estamos en posesión de una máquina, elaboradora de ideas filosóficas. No se trata de ni intentarlo, sino de de conocer las propias carencias. Oportuno hacer ilusión aquí a las ideas de Ferrater Mora "si es verdad que en filosofía pueden permitirse muchos modos de expresión no todos los modos de expresión son filosóficos".

Es más fácil creer que puede ser más sencillo escribir  sobre uno mismo, pero también en esta tarea es interesante seguir el consejo de personas que son escritores de filosofía profesionales y que intentarán ayudarnos a plasmar en papel lo que pensamos de nosotros mismo, como una continuación de la conversaci´pon privada con nuestra historia que reflejaremos en el currículum vitae. creo que lasm recomendaciones dadas por el profesor Nubiola sobre la elaboración del CV falta una fundamental: no hay que falsear ningún dato, ni omitirlo; se debe de modificar la historia personal de cada uno resaltando unos aspectos u otros, teniendo en cuenta el destinatario del CV y cuál es el perfil que se solicita, si queremos ser eficaces a la hora de conseguir nuestro objetivo.

No estoy de acuerdo con el planteamiento  que se hace tan reglado a la hora de trazar la ruta literaria del escritor profesional de filosofía. El orden a seguir a la hora de publicar dentro de los diferentes géneros literarios propuestos por el profesor sería: traducciones, recensiones de libros, comunicaciones o presentaciones a congresos, artículos en revistas especializadas y tesis doctoral.

Comentario segundo capítulo

Segundo capítulo

Escribir, difícil oficio para quien no está acostumbrado a sentarse delante de un folio en blanco o, como recomienda el profesor Nubiola, ante la pantalla de un ordenador.
Si nuestro objetivo es la búsqueda de la verdad y esta es “esencialmente comunicativa” será necesario hacer un esfuerzo personal y admitir que la escritura es “la expresión más genuina de la vida intelectual”. No es un ejercicio de voluntarismo nuestro nuevo oficio de escritor, es una práctica sistemática en la que debemos seguir unas pautas: “escribir la verdad, buscar con afán de claridad y escribir despacio”. Es un inicio para, más tarde, intentar practicar el “arte de escribir”.
Es evidente que no debemos sentirnos solos en el inicio de esta nueva tarea y la mejor ayuda a la que debemos acudir es a la de los otros: escritores, pensadores y filósofos que en un momento determinado escribieron o dijeron algo que nos llamó la atención y que, por supuesto, lo anotamos y en este momento será una fuente primordial de la que nos acordaremos, porque la leíamos y analizamos ante el impacto que nos causó. Comparto la afirmación que dijo el profesor Nubiola a Claudia Castilla Baiget (20/05/2012): “No hay escritor sin un buen lector”.
Difiero en el procedimiento de almacenar tan valiosa documentación y me inclino, en este caso, por el ordenador tal y como defendía el profesor Nubiola en el cuestionario respondido a Juan Moreno (16/03/2007): “La tecnología es utilísima para ahorrarnos el tiempo que requieren las tareas más mecánicas”. Las tareas más mecánicas, será una afirmación que volveré a retomar más tarde.
Necesitamos  que nuestro almacén de los conocimientos esté bien surtido de palabras para jugar con ellas, aceptarlas, sustituirlas, unirlas; en una palabra, servirnos de ellas para hacer frases que nos describan a nosotros mismos, como el comienzo del que será nuestro aprendizaje de escritor.
Estamos ante nuestra biografía, ante nuestro futuro. He oído muchas veces decir a mi familia que ante un problema, una inquietud, a la hora de tomar una decisión; no hay que dedicarse a pensar en ello sin tener un papel delante y un bolígrafo en la mano. El análisis de los hechos, que conformarán nuestro futuro o que han configurado nuestra biografía, necesita visualizarse mediante la escritura, para reconciliarnos con nuestra propia historia y  para invitar a participar, en estos hechos, a otros. La escritura supone para el profesor una “liberación” y sugiere ejercitar la catarsis aristotélica siguiendo un orden cronológico de los acontecimientos. Creo que cuando te falta, por razón de la edad, una amplia cronología, habría que optar por describir la relevancia de los sucesos que conforman tu vida, construyendo una pequeña, pero profunda, historia de cada uno de ellos, independientemente del momento en que sucedieron porque esa es una de las preguntas: ¿cuándo?, a la que nos tendremos que responder junto a otras ¿cómo?, ¿dónde?, ¿quién?, ¿por qué?, ¿para qué?, ¿con quién?...
Entramos en el tema de la difusión de nuestros escritos. Tengo que puntualizar que he recibido algunos consejos familiares: la información es muy valiosa porque “es poder” y, por lo tanto, hay que dosificarla en consonancia con nuestras necesidades y nuestras expectativas. Hay que medir la publicidad que se da a nosotros mismos, no sólo en internet que señala el profesor Nubiola, creo que no debemos nunca confundir la comunicación reflexionada y selectiva, con la transparencia y difusión sin control dejándola en un medio o en manos de “voceros”.
Respecto de los vehículos que podemos utilizar para hacer llegar nuestros escritos al destinatario que  hayamos elegido reflexivamente: diario, carta, email, etc. Retomo el consejo sobre el uso del ordenador como medio útil para realizar tareas mecánicas, pero, desde mi punto de vista, no para escribir una carta que no sea técnica, comercial o protocolaria. Hay cartas que hay que escribir a mano, porque lo que pensamos y decimos es, exactamente, aquello que queremos reflejar sobre el papel, deseamos materializar nuestra inteligencia y nuestro corazón: la verdad de nuestra historia o sobre nuestro futuro. Si realmente es así ¿qué necesidad tenemos de pensar que vamos a necesitar corregirlos?, estamos planteando de ¿modificar nuestra verdad, nuestra historia?. Si eso ocurre luego transcribiremos nuestra carta en el ordenador, pero habrá dejado de ser nuestra primera verdad.
Hablando de la verdad, el profesor Nubiola nos recuerda que “los filósofos están enamorados de la verdad” y que no pueden “mentir·, ni tan siquiera “decir mentiras piadosas, sin olvidar que “quien guarda silencio, no otorga”, sino que espera el momento oportuno para hablar. ¡Qué pocos filósofos auténticos existen en nuestra sociedad! Tal vez sea porque solo conocemos los “mediáticos” que buscan beneficio en una sociedad en la que la verdad y la transparencia no son cualidades humanas  valoradas por la mayoría de los ciudadanos, por lo que acabamos practicándolas en el ámbito privado, en vez de universalizarlas. Estamos ante un hecho real y con unas consecuencias nefastas: una sociedad en la que no se dice la verdad, sino las verdades que los demás quieren oír y eso, muchas veces, con la colaboración de falsos pensadores y escritores oportunistas.
En este contexto, ¿cómo nos podemos atrever a asumir sin condicionantes la afirmación del profesor Nubiola “así como todo lenguaje es público, todo pensamiento es también público. No hay pensamientos privados”? Lo acepto sólo en el caso de que el destinatario de los escritos que recojan mis pensamientos, sea designado por mí, porque no soy capaz de mantener un nivel de abstracción y generalidad que me permita no tener ningún tema tabú, ni aun siguiendo los sabios consejos de quienes lo han conseguido.

Estoy aprendiendo a escribir la verdad y en “El taller de la filosofía” se asoma un nuevo capítulo: la escritura profesional de la filosofía. En el inicio de mi aprendizaje un gran salto, espero que no al vacío

lunes, 3 de marzo de 2014

El tribunal del Santo Oficio de Logroño y don José del Campillo y Cossio

El texto trata sobre la necesaria actuación, del ministro de Felipe V, José del Campillo y Cossio por la denuncia que recibió el Tribunal del Santo Oficio de Logroño por sus actuaciones.
La autora señala una tesis ya llevada a cabo por otros autores, diciendo que el ministro realizó grandes obras reformistas en el mundo hispano, pero debido a la importancia que recibieron otros ministros como Patiño o Ensenada, hizo que sus reformas quedasen olvidadas por gran parte de los historiadores españoles.
Para demostrar tal importancia para la política borbónica de este ministro, afirma que es importante debido al rápido ascenso político que sufre desde un puesto de pequeña altura en Andalucía a ministro de Hacienda, Guerra, Indias y Marina; al igual que los posteriores que pasaron a la Historia por su reformismo en la etapa de los Borbones.
Tanta excepcionalidad de este ministro, fue investigado y parada su trayectoria debido a la denuncia que recibió por parte del Santo Oficio y concretamente por el Tribunal de la ciudad riojana de Logroño. Aunque debido a dos cartas conservadas en los archivos inquisitoriales que fue absuelto a gran velocidad, lo que le dio oportunidades para seguir siendo un político de referencia en nuestro país.
Se trata de un estado de la cuestión lo que genera la abundancia de bibliografía sobre la que se basa la autora, para realizar el estudio del tema tratado. Demuestra la importancia de las fuentes en su trabajo y nombra grandes historiadores y sus obras sobre un personaje poco conocido lo que lleva a que este ministro comience a ser reconocido por su obra reformista y su política que le llevó a los grandes puestos en el reinado de Felipe V.
El principal rasgo que presenta es que es un estudio bibliográfico tiene un carácter general sin centrarse en un estudio crítico sobre el tema. Lo que nos lleva a afirmar que es algo novedoso frente a lo habitual de realizar una explicación propia del tema.

 Sorprende que sobre un tema tan localizado  limitado tanto espacial como temporalmente, haya una presencia de tanta bibliografía. Supone una nueva visión historiográfica en cuanto a la visión que habitualmente se tiene sobre el tema en concreto, ya que es poco habitual la presencia de un personaje como este y un Tribunal excesivamente poco conocidos y estudiados, aunque hay que tener en cuenta que hasta los años 70 los archivos inquisitoriales estaban cerrados a la investigación por el problema que supuso en un país primordialmente católico con el miedo a que saliese a la luz los problemas que supuso la Inquisición en estos siglos. Pese a ello, se supone, que en el siglo XVIII, las acciones inquisitoriales son menores, pero se presenta una denuncia a la Secretaria del Santo Oficio de los abusos en los excasos casos que se producen, lo que puede implicar la corrupción de un tribunal en sus últimos años.

Comentario Primer Capítulo

Comentario primer capítulo:
“El taller de la filosofía”

A la hora de elaborar este comentario me siento, como apunta el Profesor Nubiola en su libro, como los que inician los estudios de doctorado, tomando por primera vez para intervenir en una conversación “con disimulo, como pidiendo perdón”.
Cuando un historiador se acerca a la filosofía lo hace con respeto, casi con temor reverente y por eso al oír que el trabajo intelectual tiene una dimensión manual y que existe una afinidad entre la creación artística y la creatividad filosófica, me crea una cierta esperanza, porque como ser humano necesito comprenderme a mi mismo y a lo que me rodea y para ello puedo contar con un instrumento poco conocido para mi: la filosofía.
En este primer acercamiento a “El taller de la filosofía”, entendido como un telar con una trama (la vida), una urdimbre (la comprensión) y una lanzadera mediante el que teje la traza el dibujo (la expresión); el profesor Nubiola, nos muestra algunos rasgos esenciales de la vida intelectual, en su dimensión más personal. Esa vida intelectual posee una serie de virtudes: la humildad, la capacidad de atención, el cultivo de la imaginación y el hábito de planificar.
En cualquier disciplina que desarrollemos, efectivamente, tenemos la necesidad de abrirnos a la vida intelectual y aprender a mirar con el ojo de la mente, porque los ojos, por sí mismos, no pueden llegar a ver una serie de factores externos que influyen en el desarrollo del pensamiento, el razonamiento y la vida intelectual. Es evidente que estamos ante un trabajo desarrollado, fundamentalmente, con nosotros mismos que nos conducirá a una liberación y que, más tarde,  se completará observando lo que hacen nuestros maestros.
En alusión a Spinoza y a la afirmación de que el conocimiento transforma las pasiones en afectos, puede encontrarse la clave que nos permite desarrollar la capacidad de escuchar  de comprender las razones de los demás, considero que, efectivamente, el conocimiento atempera al individuo y desarrolla un grado de generosidad hacia los demás, es una forma de conocer las limitaciones personales y convivir con las ajenas.
Interesante la referencia a Javier del Valle y a Ortega y Gasset en la que se afirma que el pensamiento es un ensayo de dominio sobre la vida y que ese dominio es una forma de señorío y totalmente de acuerdo en que no podemos estar hablando de un dominio machista, atrapado en los estereotipos, sino de un dominio diferente en cada persona, independientemente de su sexo y no por su sexo.
Fundamental la alusión a la verdad, porque debemos de vivir de acuerdo con ella, pero sin olvidar el amor, cuya presencia es tan importante como la de la ciencia. Verdad, amor y ciencia, elementos imprescindibles para aunar pensamiento y vida. Y aquí aparece la escritura de quién se dedica a la filosofía como una herramienta que le permite articular el pensamiento y la vida y que los canaliza a través del dominio de la propia lengua y de la expresión. Muy interesante la pregunta de si buscamos el “saber” o la “verdad”, asociadas a lo subjetivo y a lo empíricamente verificable; aunque la filosofía no se interesa por la rigidez, sino por el rigor de la precisión y de la propiedad.  Nadie nos debemos considerar dueños de la verdad, pero nos debemos sentir atraídos por ella. Considero que una prueba de inteligencia y humildad es reconocer que aspirar a la verdad es de una arrogancia excesiva, cuando, electivamente, no conocemos la verdad ni sobre nosotros mismos y esa debería ser nuestra primera meta, trabajo personal desarrollado con la humildad de quien reconoce sus carencias.
Todo gira entorno a uno mismo, como paso imprescindible para llegar al conocimiento de todo lo demás y a la comprensión de los maestros. El trabajo con nosotros mismos será el más arduo, porque es muy difícil buscar el equilibrio entre la timidez reflexiva y la audacia insensata y el orgullo insensato que no hay que desmontar, en mi opinión, en su totalidad como afirma Wittgenstein. Si queremos ser artesanos en ese taller, nuestro primer objetivo será confiar en nosotros mismos, conocernos, tener imaginación planificada, ser humildad, buscar la verdad, leer para buscar información, sin excederse, porque puede acabar matando nuestra creatividad. Demasiadas tareas si no somos capaces de planificarlas y aquí el profesor Nubiola nos recomienda empezar, siempre, por la más reciente.
Ha resultado interesante conocer cuál es el horizonte de la vida intelectual. De quién escribe y leemos, nosotros aprendemos a escribir, pero eso ya será objeto del próximo comentario.

Hecho y figuración en el discurso histórico

Nos encontramos ante un texto del uno de los autores más importantes dentro del llamado giro lingüístico como es Hayden White que afirma que la historia es fruto de algo que se ha encontrado fruto de una creación previa al estudio de la disciplina. Estoy de acuerdo en que primero ocurre el hecho-acontecimiento-suceso y más tarde el historiador es quien lo analiza, estamos ante una afirmación que no se puede rechazar ya que es la realidad.
Hay que tener en cuenta que este tiempo es muy necesario para la analización de un suceso histórico. Más bien a  mi modo de ver el paso de un tiempo es necesario para el correcto análisis del hecho.
Otra cuestión que plantea es la objetividad en la cual estoy de acuerdo con él ya que pese a la búsqueda de ésta por parte del historiador, en realidad conlleva una dificultad, de ahí la necesidad de una distancia temporal respecto al suceso, ya que probablemente sea la única manera de realizar un estudio veraz y objetivo sin caer en la subjetividad.
La importancia del lenguaje es latente y cada vez aumenta más su importancia ya que puede tener diversos fines: llegar a un arco de público más amplio; a la vez poseer una profesionalidad… el lenguaje expresa todo aquello que conlleva un estudio metódico.
Este giro lingüístico que representa este autor junto a otros poseerá gran influencia en el fin del siglo XX y el actual siglo XXI. Actualmente aun estamos inmersos en él y aun debe de poseer una cierta evolución.

Tumbas Médicis

Buonarroti, Michelangello, llamado Miguel Ángel (Capresse 1475- Roma 1564).
“Pintor, escultor, arquitecto y poeta. Estamos ante el aprendiz de Ghirlandaio y más tarde, según afirma Vasari, en la Libera Scuola degli Orti Medicei en San Marco, fue encauzado hacia estudios humanistas por Lorenzo el Magnífico que fue quién lo puso en contacto con los ambientes del neoplatonismo florentino, una componente esencial de su espiritualidad y conciencia artística”. (Franco María Ricci 1995: 310)
En 1494 se mudó a Bolonia y dos años más tarde a Roma, donde creó el Baco de Bargello y La Piedad Vaticana. De regreso a Florencia en 1501 esculpió El David para dedicarse, a continuación, sólo a la pintura. En 1508 en Roma pinta los frescos de la Capilla Sixtina, obra que terminó en 1512.
Será en 1516 cuando, de regreso a Florencia, se centra en la arquitectura y renueva las bases de la construcción de edificios del renacimiento en proyectos como la Nueva Sacristía de San Lorenzo. En 1534, enfadado con los Médicis, regresa a Roma y en la Capilla Sixtina pinta el Juicio Final, dónde refleja la crisis espiritual en la que se halla la civilización europea. En las dos décadas siguientes, además de los frescos de la Cappella Paolina en el Vaticano y una intensa producción escultórica (Piedad de la Catedral de Florencia, Piedad Rondanini), Miguel Ángel vuelve a interesarse por la arquitectura proyectando el urbanismo de la plaza del Campidoglio y el modelo definitivo de la Basílica de San Pedro.
Es notable su producción literaria, correspondencia, rimas… en la que deja testimonio de su integración en la cultura del Renacimiento y en la crisis que envolvió la Europa del siglo XVI.
La Sacristía Nueva de la Basílica de San Lorenzo la ideó Miguel Ángel como un conjunto arquitectónico- escultórico y tardó en finalizarla 14 años. Siguió en planta el sistema de Brunelleschi, constructor de la Basílica de San Lorenzo: dos cuadrados que se comunican con un arco de medio punto: uno, el más pequeño, con el altar y el mayor donde están los sepulcros. Cubiertas cuculiformes cierran ambos espacios, apeadas en pechinas y con los colores blanco en las paredes y en las cornisas, labradas en mármol gris. A ambos extremos de los muros traza calles estrechas, ventanas ciegas que se modulan con orejetas en los dinteles y otras, también ciegas, en los dos sepulcros, ante los que sitúa los sarcófagos con las tapas rotas arroscadas en volutas, para situar sobre sus rampas estatuas y en la hornacina central los retratos de Giuliano y Lorenzo de Médicis. Bajo la cúpula de casetones convergentes hacia el óculo de la linterna, ventanas trapezoidales: son las dos capillas dei Depositi (Enciclopedia Universal Ilustrada Tomo XXIV: 118).
El espíritu de Miguel Ángel no sólo está presente en su obra sino que parece deambular por la capilla “Junto al altar de la Nueva Sacristía encuentro un cuarto acordonado. Cerca de la entrada un guardia del museo ojea una novela. Junto a él se encuentra lo que parece un escotillón soldado al piso, con candado alrededor de su antiguo cierre << ¿Es aquí dónde se escondió?>>, le pregunto. Miguel Ángel había apoyado al gobierno Republicano que gobernó Florencia entre 1527 y 1529; cuando los Médici fueron reestablecidos en 1529 expidieron un edicto para matarlo por su apoyo a los republicanos. Fue entonces cuando Miguel Ángel se refugió en la Iglesia bajo el auspicio del prior de San Lorenzo, quien era su amigo. <<Según dicen es ahí donde se escondió>>, me responde distraído el guarda. <<Por seis meses>>, añado. <<Según dicen>>. Esboza una sonrisa y dice << Seis meses es mucho tiempo en un cuarto tan pequeño. Trabajó mientras estuvo ahí. Dicen que podía vivir sin comida o agua por largos periodos de tiempo pero no podía vivir sin un cincel y un martillo, o algún otro instrumento para dibujar o pintar.” (Lorenzo Carcaterra 2007)
En la Nueva Sacristía el simbolismo está presente en su más plena significación. Enmarcadas las dos capillas en una estructura piramidal, cada una de ellas contiene dos figuras alegóricas, tendidas y de espaldas, los rostros no son retratos porque Miguel Ángel se acerca al manierismo y por eso están inacabados, también los cuerpos distorsionados se alejan de los ideales renacentistas.
Los dos príncipes representan el alma neoplatónica: el “vir activus” y el “vir contemplativus” y las cuatro estatuas colocadas sobre los sarcófagos: la Aurora y el Crepúsculo (Lorenzo) y el Día y la Noche (Giuliano); son imágenes del tiempo, el nacimiento de todo tiempo a partir del final de otro, refrendado por la distorsión espiral de sus cuerpos. “Recostados sobre la tapa de los sarcófagos, parecen quebrantarla con su peso, de modo que el alma, finalmente libre, se vuelve a la contemplación eterna de la idea de la Vida, simbolizada por la Virgen y el Niño. Hacia la Virgen se vuelven ambos Duques y la contemplan. Y justamente, en estas figuras, colocadas en un equilibrio inestable sobre las tapas curvas de los sarcófagos, se hace más insistente lo inacabado; sus basamentos son rudos, como si fueran fragmentos de naturaleza que las imágenes han traído consigo de su  cíclico viaje sobre la Tierra; pero son rudas también algunas partes de las figuras (por ejemplo, el rostro del Día), porque la sustancia del tiempo es ambigua: por un lado domina el destino de los mortales y por otro a la eternidad misma” (Giulio Carlo Argan 1987:66)
Las tumbas están adosadas a la pared, ni salen de ella ni la penetran, jugando con los elementos arquitectónicos, el volumen de los sarcófagos, la luz y las estatuas. “Las dos estatuas alegóricas se disponen sobre cada uno de los sarcófagos en una posición imposible desde el punto de vista naturalista: resbalan sobre la superficie curva, introduciendo un principio de equilibrio inestable que su ingente masa, desproporcionada respecto del sarcófago, si atendemos a las normas clásicas, no hace más que intensificar. De este modo el volumen interrumpe la pureza del juego arquitectónico, la relación vertical/horizontal/arco en que éste se apoya. Sobre las estatuas, independiente temática y compositivamente en otro plano, con un espacio propicio, excesivamente reducido para el tamaño de la escultura, la estatua sedente pensativo [sic] Lorenzo, vigilante Juliano [sic]. Quizá la obra hubiese cambiado profundamente de haber introducido Miguel Ángel las estatuas alegóricas destinadas a las hornacinas, hoy vacías, que flanquean a Lorenzo y Juliano [sic], y las que estaban proyectadas para el suelo, delante de los sarcófagos (...) A no dudarlo su grandeza hubiera sido distinta más terrible y extrema” (V. Bozal 1992: 174-175)
La belleza está representada en estos grupos escultóricos en todo su esplendor y el Humanismo, como hemos indicado, es su guía. “Los hay que destacan por encima de los demás y se les tiene en mayor estima. Son los que disfrutan con la contemplación y goce de las cosas bellas” (Angelo Poliziano 1492). El Humanismo justifica y da sentido a este movimiento artístico “El Renacimiento no es una idea, una teoría, una ideología o una corriente histórica o cultural. El Renacimiento son sus hombres: Leonardo, Ficino, Miguel Ángel” (Pedro R. Santidrian 1986:117). Estos hombres, artistas geniales e imperecederos son analizados desde el punto de vista antropológico como seres dotados de facultades esenciales entre las cuales se valora especialmente la creación como primer fruto de la libertad. ¿Cómo crea el hombre en el arte?, con la inteligencia y el trabajo que le sirven para llegar a ser lo que quiera, es decir, culminar su libertad  (Agnes Heller 1980).
El Humanismo es creación libre, en este caso representada por un hombre admirable: Miguel Ángel que, a través de estas obras, nos hace sentir la belleza, la fortaleza, la armonía y la proporción; en resumen, todo aquello que es esencial en el hombre, aunque eso no significa que el trabajo del artista debe de responder a la realidad fotográfica de los modelos que, en este caso, está inmortalizando a través de su creación artística. Es posible que los Médicis fueran idealizados, así se desprende de este comentario: “A Giuliano que como ya se ha dicho, tenía un carácter agradable, se le ha colocado una estatua que representa casi lo contrario; mientras que Lorenzo, el más vulgar y débil de la familia Médicis, se le ha representado con el famoso << penserioso>>, una estatua de tal calidad que un poeta  tras otros han escrito líneas inspiradísimas sobre el carácter de ese hombre, atribuyéndole  cualidades que sólo tiene su estatua. Cuando se le dijo a Miguel Ángel que las figuras que había esculpido no tenían el menor parecido con los hombres que representaban, contestó desdeñosamente:<<quién va a saberlo en tiempos futuros>>. De modo que el famoso <<penserioso>> de las tumbas de la sacristía nueva, a pesar de que se llame Lorenzo de Médicis, no es Lorenzo El Magnífico, sino ese tipo disoluto y un tanto hortera, hijo de Pedro el Gafe, que fue el peor de la familia. Hasta ahí el realismo de Miguel Ángel” (Luís Racionero 1990:101)

Hasta aquí, el valor creativo humanista de Michelangello Buonarroti.


BIBLIOGRAFÍA:

ARGAN, Giulio Carlo (1987): Renacimiento y Barroco, Madrid, Acal, vol. II Pág. 67-68
BOZAL, V. et all. (1992): “La escultura” Historia del arte, Barcelona, Carroggio S.A, tomo 2 Pág. 174-175
CARCATERRA, Lorenzo (2007): “Al acecho de Miguel Ángel” National Geographic
HELLER, Agnes (1980): El hombre del Renacimiento Pág. 432
POLIZIANO, Ángelo (1492): Lamia
RACIONERO, Luís (1990) La Florencia de los Médicis Pág. 101
RICCI, Franco María comp., (1995) La enciclopedia del arte S. XV-XVI, tomo I, Pág. 310
SANTIDRIAN, Pedro R. (1986): Humanismo y Renacimiento
Recopilación (1985): Enciclopedia Universal Ilustrada, Espasa Calpe, tomo XXIV, 104

Cuestionario Tragedia Griega

-RESUMA EL ARGUMENTO DEL EDIPO REY DE SÓFOCLES EN UN MÁXIMO DE CINCO LÍNEAS.

 Edipo, un rey héroe, está rodeado de destrucción y dolor por la peste que asola Tebas. El oráculo de Delfos, su madre y esposa Yocasta y un viejo criado-pastor de su padre Layo, le demuestran que “es un maldito e hijo de malditos” convirtiéndose en un ciego en manos del dios.


2- RASGOS POSITIVOS Y NEGATIVOS EN EL PERSONAJE DE EDIPO: ¿SE PUEDE HABLAR DE UNA CULPA O ERROR POR SU PARTE?

En cuanto a los rasgos positivos que he encontrado en la obra de Sófocles y más concretamente en el personaje principal, quiero señalar  que Edipo conoce y sufre por la situación que está viviendo el pueblo de Tebas, el  grave problema de la peste y como él, que  es un gran rey, intuye que tiene que haber algún motivo para que la situación sea tan terrible y decide buscar la verdad y descubrir quién es el culpable de que los ciudadanos de su ciudad sufran. Edipo no tenía ninguna necesidad de iniciar esta investigación porque él, en este momento, era inocente ante sus ojos y poderoso para sus ciudadanos, pero quiere conocer el por qué de esta situación.
El rey demuestra ser  extremadamente noble porque cuando los acontecimientos van avanzando y el oráculo, Tiresias, Creonte…le hablan planteándole dudas y hechos que cada vez le hacen sospechar nuevas situaciones, aunque sigue sintiéndose inocente de los hechos que han provocado tanta desgracia para su pueblo. Incluso cuando esas dudas son mayores y empieza a intuir su ruina, quiere saber la verdad y   sigue adelante con la investigación.

El aspecto más negativo del personaje es que su destino y los dioses controlaban su vida, al igual que las de todos los griegos, por lo tanto no es dueño de su voluntad. Parece que en ningún caso podía decidir que es lo que quería hacer, porque el oráculo ya comunicó a  Layo y Yocasta, sus padres, lo que iba a ocurrir. Es una tragedia para el personaje que solo su muerte hubiera impedido que realizada actos tan terribles.
Es horrible para Edipo la ignorancia que tiene sobre su origen ya que el desconocer cuales fueron las circunstancias de su nacimiento y  quienes eran sus padres le llevan a cometer crímenes terribles

Otra circunstancia que resulta negativa en el personaje de Edipo se produce cuando, tras todo lo ocurrido, no muere y  se queda ciego continuando su sufrimiento, su tragedia.

Edipo comienza la tragedia siendo un personaje dotado de una gran seguridad y poder y a pesar de no ser culpable de sus actos que los ha marcado el destino, con el  paso del tiempo se ve tan involucrado en los hechos que deja de ser un rey héroe y se transforma en un personaje inseguro que espera la decisión del dios y de Creonte.


3- ¿QUIEN ES EL PROTAGONISTA REAL DE LA ANTIGONA SE SÓFOCLES, ANTIGONA O CREONTE?: RAZONE LA RESPUESTA.

Yo creo que en el inicio de la tragedia hay un coprotagonismo ya que ambos tienen importancia, están contándonos una misma historia con dos puntos de vista, guiados por dos motivos diferentes aunque  tiene el mismo protagonista Polinices. Creonte se niega a darle  sepultura a un enemigo de la patria y según el, también de los dioses, sigue la ley. Antígona también respeta la ley familiar que le obliga a dar sepultura a su hermano, por lo tanto los dos son protagonistas mientras explican las razones por las que quieren actuar de forma tan diferente, pero ambas están de acuerdo con la ley.
Al final de la obra  el protagonismo pasa al  personaje de Creonte porque consigue, tal vez gracias a la falta de inteligencia de Antígona que se empeña en enterrar a un traidor en Tebas, su propósito: destruir a la familia de Edipo y convertirse en un Rey al que nadie puede ya cuestionar, por eso también intenta  acabar con Ismene, hermana de Antígona.
Creonte en un personaje débil, que toma decisiones con consecuencias terribles, aunque en un momento determinado intenta volverse atrás; pero tiene el favor del coro, más porque éste no está de parte de Antígona que por otro motivo y de alguna forma también es el protagonista que acaba vengando a su hermana Yocasta.


4- COMPARE A ANTIGONA Y MEDEA EN TANTO QUE PROTOTIPOS DE MUJER.

 Antígona es una mujer débil, que solo está movida, a la hora de enfrentarse con Creonte por motivos de tradición familiar. Mas que tomar una decisión valiente parece que es una persona terca y obstinada que decide enfrentarse a Creonte sin analizar cual sería la mejor forma de conseguir su propósito, es más cabezonería que inteligencia y además no quiere ser la única protagonista de la desobediencia y pretende implicar  a su hermana Ismene. Se transforma en una víctima de la tragedia y muere.
Medea es fuerte y provoca la tragedia por amor y despecho, pero eso no impide que la ejecute con una gran inteligencia, no dejando nada al azar. Solicita compasión para iniciar su plan y consigue que quienes se han interpuesto en su camino mueran Glauce, el padre de esta: Creonte, sus hijos y después de tan trágicos hechos ella no es víctima como Antígona, sino que ya había preparado su huida y su boda con Egeo en Atenas.


5-ANALICE Y COMENTE EL ENFRENTAMIENTO ENTRE MEDEA Y JASÓN EN LA MEDEA DE EURIPIDES.

Todo parte del abandono de  Medea por parte de Jasón  para casarse con Glauce, la reina de Corinto, lo que lleva a  Medea a la desesperación, a la ira y a la  venganza.  Cuando ya ha pensado en un plan para vengar el desprecio de su marido se presenta ante Creonte, el rey, humilde y sumisa para que no le expulse con sus hijos y cuando se da cuenta que no lo va a conseguir, cambia de plan y le pide un día más en Corinto.
Aquí inicia su plan. En el primer diálogo de Jasón con Medea parece un hombre sumiso con el poder que aunque no ama a Medea dice que ha intentado que los soberanos no la desterraran, pero que ella ha provocado que no la perdonen. Medea está furiosa con él y le recuerda lo mucho que le debe y la situación en la que van a quedar ella y sus hijos. Cuando Jasón pretende demostrar que ella sólo fue un instrumento de los dioses para ayudarle y que el es muy inteligente al conseguir  casarse con la hija de Creonte y que los hijos no deberían nacer de una mujer, Medea se enfurece y cuando se presenta como alguien generoso que les ayudará en el destierro, se da cuenta que no va a conseguir nada de Jasón e inicia su plan de huida y venganza.
Y es cuando cambia su forma de dialogar con Jasón. Se transforma en una mujer sumisa, que reconoce que solo ella ha cometido errores en su forma de comportarse y vuelve a utilizar a sus hijos para convencer a Jasón de que está muy arrepentida por lo que deberían de quedarse con él y así  recibir una educación adecuada, cuando lo único que pretende es que se acerquen a Glauce y poder matarla.
Jasón se cree todo lo que le dice, acepta quedarse con sus hijos y entonces Medea sabe que los puede perder, por lo que decide matarlos.

Después de cumplir su venganza, cuando Jasón está desesperado al saber que sus hijos están muertos le dice que es un animal  y ambos se culpan de la muerte de los hijos. Medea se justifica diciéndole que los dioses saben todo lo que ha pasado y que él es el único culpable por lo que no le permite ni tocarlos ni, lo que era muy importante: enterrarlos.

El Esperanto

El esperanto es un claro ejemplo de esos proyectos que, aunque nazcan apadrinados por entusiastas seguidores, nunca  llegan a ser aquello que sus mentores habían soñado,  casi nos atreveríamos a decir que ha terminado siendo un invento casi inútil, guardado en el desván de las lenguas artificiales.
¿De qué sirvió el esfuerzo de 180 alumnos y profesores de la Green Lane Council School, Patricoft de Eccles (Inglaterra) en 1916? ¡Absolutamente de nada!; a pesar de que, según la inspección del Comité de Instrucción Pública de Eccles, los resultados del experimento lingüístico fueron espectaculares. El representante del Comité de Instrucción Pública publicó un informe  sobre la escuela y el esperanto “Verdad es que en ella se enseñaba el francés, pero el tiempo limitado que podía consagrarse a su estudio no había permitido obtener ningún resultado apreciable (…) visité la escuela a los pocos días de haber cumplido el tercer mes de enseñanza. Los progresos alcanzados eran sorprendentes: los muchachos podían conversar con gran seguridad y facilidad (…) habían adquirido un conocimiento perfecto de la lengua”.
El entusiasmo por los logros obtenidos tienen, para el inspector de Eccles, un valor que va más allá de los aspectos técnicos “Pero esto no era todo: había en ellos un  algo indefinible de que carecían antes: habían adquirido un refinamiento espiritual que se comprobaba muy fácilmente (…) la adquisición de una lengua en la cual un gran número de raíces vienen del latín y cuya precisión es notable, había dado exactamente el mismo resultado que el cultivo de las lenguas clásicas (…) la expresión incorrecta en la formación de las frases había desaparecido completamente, presentándose muy visibles progresos en la claridad del estilo (…) los alumnos sabían ahora hacer una selección reflexiva de las palabras (…) se ha comprobado en sus casas una mejor comprensión de la significación exacta de las palabras”.
Para el representante del Comité de Instrucción Pública, el esperanto no sólo tiene una utilidad desde el punto de vista pedagógico y educativo, si leemos el final de su informe: “La experiencia ha conducido de un modo indubitable a un éxito evidente (…).  De tal modo quedé sorprendido con los progresos alcanzados por los niños, que me decidí por aprenderlo para mejor juzgar su trabajo. Estudiando yo mismo la lengua tuve aún mejor ocasión de comprobar su gran valor pedagógico y educativo”.



LA POLÍTICA ENTRA EN ACCIÓN


Hasta el momento, podemos pensar, que estamos ante el entusiasmo de un grupo de profesores y alumnos que han iniciado una experiencia pedagógica con la que pretendían, mediante la creación de una lengua artificial,  superar todas las deficiencias educativas y comunicativas. Los  resultados experimentales necesitaban un espaldarazo político para convertirse en un proyecto oficial y en este caso, debido a la proyección

que quería dársele al esperanto,  si este padrinazgo era internacional, el objetivo estaba cumplido.
En 1922 la Sociedad de las Naciones, a propuesta de los delegados de África del Sur, Brasil, Bélgica, China, Chile, Colombia, Haití, Italia, Japón, India, Persia, Polonia, Rumania y Checoeslovaquia (sic); solicita que la enseñanza del esperanto en las escuelas del mundo sea un idioma auxiliar y para ello se acuerda que la Secretaría de la Sociedad prepare un informe en el que se justifique la decisión.
“Memoria dirigida a la Sociedad de las Naciones por la Conferencia Internacional sobre la enseñanza del esperanto, reunida en la Secretaría de la Sociedad de las Naciones del 18 al 20 de abril de 1922.
Nosotros, educadores, delegados de autoridades escolares y de asociaciones pedagógicas de 28 países y representantes oficiales de 16 gobiernos, reunidos en la Secretaría  de la Sociedad de Naciones, afirmamos nuestra convicción de que el estado deplorable a que ha llegado el mundo civilizado es debido, en gran parte, a la incomprensión y desconfianza que separan a los pueblos.
Afirmamos nuestro convencimiento acerca de que los únicos remedios a este mal son, ante todo, la educación y el principio de aproximación internacional, que constituyen  la base de la Sociedad de Naciones.
Consideramos uno de los medios más eficaces para la solución del problema de la reconstrucción del mundo la lengua auxiliar internacional esperanto, estimando que debe figurar en el programa de las escuelas de todo país civilizado”.
Ya estaba hecha la declaración de intenciones a través de un organismo internacional; teóricamente, un gran logro para la expansión de la lengua artificial. En este mismo documento encontramos una de las claves de lo que más tarde, tal vez, derivó en uno de los motivos  para que el esperanto se quedara en un fallido y ambicioso proyecto.
“Lejos de atentar contra las lenguas nacionales, por el contrario, su estudio ayuda a los niños para escribir y hablar más correctamente su lengua patria. Se ha observado y comprobado que, mediante el estudio del esperanto, los niños han conseguido una mejor pronunciación, una exposición más clara, un juego de palabras más juicioso, un conocimiento más firme de su sentido exacto,  un progreso ortográfico y de análisis gramatical de la lengua patria”.
Lenguas nacionales, lengua patria…. Tal vez precisamente el peso de la lengua como identidad diferenciadora de los nacionalismos estatales y regionales; fue el motivo fundamental para que los Estados, haciendo caso omiso de la declaración de la Sociedad de las Naciones, no apoyaron una lengua común aunque “se aprobó un acuerdo para que los diferentes estados que forman parte de la Sociedad de las Naciones se comprometan a introducir gradualmente en sus escuelas públicas la enseñanza del esperanto, si bien este acuerdo no será obligatorio hasta que lo firmen diez estados, cinco de ellos europeos”.
Este acuerdo se tomó el 21 de septiembre de 1922 en Ginebra y se quedó, sólo, en una  declaración de intenciones.







UN ARDUO TRABAJO Y UN RESULTADO MEDIOCRE

 

En el primer cuarto del siglo XX parecía que el esperanto era un movimiento internacional tan activo, ilusionante y sencillo para sus promotores, que hubiese bastado un toque de “oficialidad nacional” para que se hubiera impuesto como una herramienta de comunicación global. Prueba de ello son las informaciones de aquella época “El uso práctico del esperanto está facilitado por el notable funcionamiento de la Universala Esperanto Asocio (…) en la Universidad Internacional de Bruselas se verifican conferencias en esperanto (…) los grandes congresos universales de esperanto se han reunido en Bolonia, Ginebra, Cambridge, Dresden, Barcelona, Washington, Cracovia, Berna, La Haya y Praga (…) La Biblioteca de la Oficina Central Esperantista en París contiene 4.000 volúmenes y la de  la Asociación Esperantista Universal, en Ginebra, 3.200. Desde 1920 se publica, por término medio, un nuevo libro en esperanto cada dos días sobre temas diversos: ciencia, religión, literatura, etc.

Respecto a las gramáticas y vocabularios, los hay en lenguas inglesa, árabe, armenia, checa, búlgara, danesa, estona, finlandesa, francesa, alemana, griega, galesa, hebrea, española, holandesa, húngara, islandesa, italiana, japonesa, catalana, china, croata, latina, letona, lituana, portuguesa, rumana, rusa, rutena, ucrania, servia (sic), eslovaca, eslovena, sueca, turca y visaya (Islas Filipinas).
Hay publicados vocabularios técnicos sobre: anatomía, química, ciencias, matemáticas, música, fotografía, farmacia, filatelia (…)”.
La prensa esperantista contaba con un centenar  de publicaciones periódicas, mensuales, quincenales o semanales y se publicaba, incluso, una revista especial para ciegos en la escritura Braille.
Todo este esfuerzo llevado a cabo, hasta ese momento, recibió un espaldarazo con la celebración de tres Congresos Internacionales en 1925 “el Congreso de Radioaficionados se celebró en París, en el mes de abril de 1925; asistieron centenares de representantes, y tomaron con entusiasmo el acuerdo de adoptar el esperanto como idioma universal para la radio (…) hay importantes estaciones emisoras de diferentes naciones que lo vienen usando.
El Congreso Ibérico celebrado los días 10 al 12 de mayo último, además de los esperantistas españoles acudieron delegados de Bélgica, Checoeslovaquia, Alemania e Inglaterra”.
Es curioso resaltar que en este Congreso, donde se decidió crear la Sociedad Esperantista Española, se eleva una petición oficial , no  a los organismos educativos, sino al presidente del Directorio Militar y al subsecretario de Gobernación, haciendo unas curiosas postulaciones: “1- Que se creen progresivamente cátedras oficiales de esperanto  en los institutos, normales y escuelas de comercio. 2- Que España inicie o sugiera la celebración de una convención oficial de Estados que resuelva el caos lingüístico en la diplomacia, en el comercio, en las relaciones culturales, etcétera, mediante la adopción del esperanto, a semejanza de lo hecho con la implantación del sistema métrico decimal. 3- Que el servicio telegráfico español admita el esperanto, según acuerdo de la Liga de las Naciones”.
Antes de pasar a comentar los resultados de la Conferencia Internacional de París, en los meses de abril y mayo de 1925, en la que se habló del uso del esperanto en las relaciones comerciales y su difusión en las ciencias; es importante señalar que asistieron 23  países, representados por un total de 225 delegados; es bastante significativo, tal vez una consecuencia del momento histórico y político que se estaba viviendo, hacer una mención sobre quienes fueron los representantes españoles: LeonardoTorres Quevedo, de la Real Academia de Ciencias; Don Vicente Inglada, profesor de la Escuela Superior de Guerra; y don Emilio Herrera, comandante de aviación. El aspecto pedagógico de la conferencia, afortunadamente, lo marcó la comisión de 34 miembros de la  Academia Francesa de Ciencias que redactaron las conclusiones de la misma: “1- Que la enseñanza del esperanto, obra maestra de lógica y sencillez lingüísticas se introduzca, por lo menos, con carácter electivo en los programas oficiales de los centros docentes. 2- Que en los Congresos Internacionales el esperanto sea adoptado como idioma oficial, con el mismo derecho que las lenguas nacionales, hasta el momento en que la experiencia confirme su aptitud, para convertirse en la única lengua oficial internacional. 3- Que se llame la atención de los directores de las casas editoriales científicas y técnicas acerca de lo que les interesaría el empleo de este idioma internacional en sus publicaciones para el extranjero. 4- Que, desde luego, los hombres de ciencia y los técnicos se pongan en condiciones de emplear el esperanto en sus relaciones con sus colegas extranjeros, haciéndoles saber que están dispuestos a emplear la lengua internacional. 5- Que se nombre una Comisión para preparar y elaborar los vocabularios esperantistas de las ciencias puras y que se invite a las sociedades técnicas para hacer lo mismo en lo que concierne a sus respectivas especialidades”


VEINTIOCHO LETRAS Y DIECISÉIS REGLAS GRAMATICALES


El ser humano es un ente complejo al que le gustan las complejidades. Tal vez por ese motivo la lengua está llena de matices y algunas palabras tienen un significado u otro con, solamente, ponerles o no una tilde.
Ante esta situación aparece el esperanto, una lengua artificial con un alfabeto de veintiocho letras y dieciséis reglas gramaticales, tal vez insuficiente para las lenguas clásicas y para las actuales; esa sencillez perseguida por el inventor de este instrumento de comunicación universal, el Dr. Lázaro Luis Zamenhoff (Bialystok– Polonia-15/12/1859) era muy práctica, pero no  consiguió ilusionar al mundo.
No es este el lugar para presentar una exhaustiva exposición sobre cuales son las normas y reglas a seguir para aprender el esperanto, pero el trabajo quedaría incompleto si no se hace una breve reseña  práctica  de esta lengua artificial que, como ha demostrado el paso del tiempo, apasionó a muchos y dejó indiferentes a muchos más.

Alfabeto

A a- B b- C c- ch- D d- E e- F f- G g- gh- H h – hh- I i - J j jh- K k-L l- M m- N n-
O o- P p- R r- S s- sh- T t - U u-  u- V v- Z z.

Observación: las letras marcadas en negrita sustituyen a otras que no existen, en cuanto a la grafía, en el idioma castellano.

En esperanto se pronuncian todas las letras y cada una tiene siempre el mismo sonido (no como en castellano que la “c” se pronuncia ca- co- cu y en otro caso ce- ci).
No hay letras mudas y tampoco un mismo sonido se representa por signos distintos (en castellano la “c”,  la “k” y la “q”).
Cada vocal es una sílaba con excepción de la “u”  breve que forma diptongo y se pronuncia rápidamente (como Europa en castellano).
Todas las palabras son graves, es decir, cargan la pronunciación en la penúltima sílaba por lo que no hay necesidad de utilizar acentos como signos ortográficos.
Los sonidos de las vocales son exactamente iguales que en castellano y lo mismo las consonantes, con las siguientes variaciones: 


cà suena como “ts”
càcomo “ch” fuerte
gà suave como en castellano con la “a” (genio se lee “gue-ni-o”)
gà como “dch”
hà como una aspiración suave al igual que en algunos lugares meridionales
hà suena como la “j”
jà igual que nuestra “y”
jà es un sonido extraño uniendo “y”-“ch”
kàsonido fuerte de “c” o “q”
sà como el conjunto “sch”
zà es el resultado de unir “ds”

No hay letras dobles ll-rr;  cuando se juntan dos consonantes se deben pronunciar separadas “mallonga” se pronuncia “mal-lon-ga”.

Formación de palabras

En esperanto las palabras se forman, como en casi todos los idiomas, con una raíz que es la parte invariable y terminaciones gramaticales, afijos, sufijos y prefijos.
Verbo vender raíz: vend
                       Terminación del infinitivo- er
                        En esperanto: “vend-i”

Ejemplo de sufijo (letras añadidas al final):
“Ad”àindica acción continuada. “Parolo” (palabra) se forma “parolado” (acción continuada de hablar o discurso)
“An”à expresa idea de habitante. “Madrido” (Madrid)- “madridano” (madrileño)
“Er”à porción más pequeña de una cosa.” Mono” (dinero)- “monero” (moneda)
“Il”à representa la idea del instrumento con el que se realiza la acción de la raíz    “Kudri” (coser)- “kudrilo” (aguja.)

El artículo

No existe en esperanto el artículo indefinido sólo el artículo definido “la” para todos los géneros, casos y números.

El sustantivo

Los sustantivos tienen la terminación “-o” y para la formación del plural se le añade
“-j”. Sólo existen dos casos: nominativo y acusativo y este último nace del nominativo añadiéndole la terminación “-n”; el resto de los casos se expresan ayudados por las preposiciones.
Para simplificar la escritura la última letra del sustantivo y del artículo pueden ser suprimidas y sustituidas por apóstrofe.

Los numerales

Los numerales fundamentales son “unu” (uno) –“du” (dos) –“tri” (tres) –“kvra” (cuatro) –“kvin” (cinco) –“ses” (seis) –“sep” (siete) –“ok” (ocho) –“nau” (nueve) –“dek” (diez) –“cent” (cien) –“mil” (mil).
Las decenas y centenas están formadas por la simple unión de los numerales.
Para la designación de los numerales ordinales se añade la terminación del adjetivo; para los múltiplos el sufijo “–obl”; para los partitivos “-on”; para los colectivos “-op”; para los disyuntivos la palabra “po”.

Los pronombres

 Los pronombres personales son: “mi”-yo, “ci”-, “li”-él, “si”-ella, “gi”-él o ello, “ni”-nosotros, “vi”-vosotros o ustedes,”ili”-ellos.
Los pronombres posesivos se forman de los personales con la terminación “–a” del adjetivo y con la terminación “–j” para el plural.
Los pronombres demostrativos son:”ci tiu”-éste, “tiu”-ese, aquel, “ci tio”-esto, “tio”-eso aquello
Pronombres relativos: “kiu”-qué, quién, “kio”- qué cosa, “kia”- qué, cuál, “kies”- cuyo, cuya, cuyos, cuyas.
Los pronombres indefinidos son:” iu”, “iuj”-alguno, alguna, algunos, algunas, “io”-algo, “ia”, “iaj”-algún, alguna.

El verbo

El verbo no está modificado según género y número. Las formas del verbo en esperanto son: presente con la terminación “-as”, pasado con la terminación “-is”, futuro con la terminación “-os”, condicional con “-us”, imperativo con “-u”, indefinido con la terminación “-i”.
Los tiempos compuestos de los verbos se forman con el auxiliar “esti” (ser) y con los participios. En esperanto hay tres participios activos y tres pasivos. Para la negación se pone la partícula “ne-” antes del verbo y para la forma interrogativa se comienza con la partícula “cu-“que no tiene traducción y  cuando la frase comienza con una partícula interrogativa “kial” (¿por qué…?), “kie” (¿dónde….?), se suprime directamente. Por lo tanto, todos los verbos son regulares, no varían dentro de cada tiempo y no existe la necesidad de hacer uso de los pronombres en todos los casos y tenemos la determinación de los tiempos por las vocales “a” (presente), “i” (pasado) “o” (futuro), como una norma general.


Los adverbios

Los adverbios en esperanto terminan en “-e” y equivale a la española “-mente” “bona” (bueno), “bone” (buenamente). Aunque el número de los adverbios es ilimitado hay un número reducido que carece de la terminación “-e” y son palabras de mucho uso: “hierau” (ayer)- “hodiau” (hoy), “morgau” (mañana), “ne” (no), “pli” (más), “tre” (muy).
El superlativo absoluto se forma con “tre” o la terminación “-eje”; el de superioridad con “plej…el” (el más….que) y el de inferioridad con “malprej…el” (el menos...que).

Las preposiciones

El uso de las preposiciones exige un gran rigor y precisión en esta lengua artificial, lo que hace que se haya creado una preposición “je” que es una especie de comodín, que carece de significación propia y se usa para no cometer errores gramaticales.
Algunas preposiciones son muy utilizadas: “al”- a, hacia, “apud”- junto a, “da”-de, “dum”-durante, “en”-en (dentro), “gis”-hasta, “inter”-entre,” kum”-con, “per”-por,
”por”-para, “post”- detrás, “pri”-sobre, “sen”-sin, “sub”-bajo, “sur”-sobre.

La conjunción

Es curioso resaltar que en la gramática primitiva de Zamenhoff no se hablaba de la conjunción, aunque se utilizan  y la aplicación gramatical es, en general, la misma que en castellano.
“Au”-o, “car”-porque, “cu”-si, “do”-pues, “kaj”-y, “ke”-que, “kvankam”-aunque, “plie”- además, “sed”-pero.

Palabras compuestas

El esperanto tiene una gran flexibilidad para formar palabras compuestas, se ha procurado reducir al mínimo el número de matrices primitivas y modificándolas, unas veces con los afijos y otras simplemente uniendo unas con otras, conseguimos ampliar el vocabulario.
“Cashundo”- perro de caza, “sunhorlojo”-reloj de sol, “scribotablo”-mesa de escribir.










Cuadro de voces simples

No debemos terminar este ensayo sin aportar un cuadro de voces simples en el que se demuestra, una vez más, la estructura lógica y sencilla del esperanto; ya que estas cuarenta y cinco palabras, de uso muy frecuente, nos ofrecen un conocimiento básico  de esta lengua.






Substantivadas



Indefinidas


Negativas

Colectivas


Demostrativas


Interrogativo-relativas


io
Alguna cosa


nenio
Nada


cio(*)
Todo


tio
Eso, aquello


kio
Qué, lo que

Adjetivadas
ia
Algún
nenia
Ningún

cia(*)
Cada

tia
Tal
kia
Qué, cual

Personales

iu
Alguien

neniu
Nadie
ciu(*)
Cada uno

tiu
Ese, aquél
kiu
Quién, el cual

Posesivas

ies
De alguien

nenies
De nadie
cies(*)
De todos
ties
De tal

kies
De quién, cúyo

Adverbio de cantidad
iom
Algo

neniom
Nada

ciom(*)
Todo

tiom
Tanto

kiom
Cuánto
Adverbio de tiempo
iam
En algún tiempo

neniam
Nunca

ciam(*)
Siempre

tiam
Entonces
kiam
Cuándo

Adverbio de causa

ial
Por algo

nenial
Por ningún


cial(*)
Por todo
tial
Por eso
kial
Por qué
Adverbio de modo

iel
De algún modo

neniel
De ningún modo

ciel(*)
De todos modos

tiel
Tan, así

kiel
Cómo
Adverbio de lugar
ie
En algún lugar
nenie
En ningún lugar

cie(*)
En todas partes
tie
Allí, ahí
kie
dónde
(*) ^ Sobre la “c”.


Tal vez, demasiada sencillez no ha podido sustituir a la riqueza y complejidad de las lenguas no artificiales y, además, tampoco ha conseguido vencer  la batalla de la identidad lingüística, como símbolo diferenciador de las culturas autóctonas, alentadas por los nacionalismos. Y todo ello a pesar de que son muchos y muy significados, los seguidores del esperanto: Reinhard Selten (Nobel de Economía 1994), el escritor William Auld propuesto como Nobel de Literatura en 1998… y grandes los esfuerzos, como la edición  en nuestro país del Gran Diccionario español-esperanto (2003)
El laboratorio  creó un producto de comunicación universal, sencillo y de fácil aprendizaje que hubiera sido muy práctico para quienes nos pasamos media vida aprendiendo idiomas, sin acabar de dominarlos nunca.
Entonces ¿por qué no  ha tenido éxito  una lengua que se aprende en unas semanas?... es tan sencilla,  tan aséptica, que no  supone un reto  y es posible que por eso, no haya triunfado como sus seguidores habían soñado.


Bibliografía:
Fernández Ascarza- Victoriano. “El esperanto: valor pedagógico de este idioma universal, nociones elementales de gramática”. Cartillas Pedagógicas. Magisterio Español (Madrid).
Soler y Valls- Fernando. “El idioma internacional auxiliar esperanto al alcance de todos: vulgarización de gramática esperanto- española”. Imprenta Fermar (Valencia).
Sociedad de Naciones (1923). “El esperanto como lengua auxiliar internacional. Informe de la Secretaría General a la tercera sesión, revisado por la quinta comisión y adoptado por unanimidad por la Sociedad de Naciones el día 14 de septiembre de 1922”. Versión española editada por la Federación Zamenhoff (Madrid).

Del Barrio- José Antonio. “Leonardo Torres Quevedo y el esperanto”. Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales (Madrid).